Comienza el ejercicio.
Ahora veréis por qué os digo esto; Como en el caso anterior, lo primero es preparar cerca todo lo que vamos a necesitar, así que nos vamos a una fuente de agua con desagüe, y hacemos hueco para llevar:
Los botes de líquidos (Revelador, paro, fijador, humectador)
Termómetro
Jarra medidora
Jarra con agua (si es más grande que el bote de revelado mejor, ya que nos permitirá tener bastante agua y con la temperatura controlada rápidamente)
Cronómetro
Dos embudos (paro y fijador)
Pinzas de peso para los negativos.
REVELADO
Yo uso carretes Kodak TRI-X 400, pero en los carretes suele venir también las proporciones que os voy a indicar a continuación, aunque a veces es complicado de leer. Como ya os comenté en el primer post, la mezcla de Stock con agua es 1:1, así que en función de los carretes que vayamos a revelar en el mismo bote, pondremos 150ml de revelador y 150ml de agua por cada carrete, en mi caso como son 2, pondré 200ml de revelador y 300ml de agua.
Antes de mezclarlo tenemos que tomar la temperatura al revelador, porque esa es la que nos hará calentar o enfriar el agua para conseguir la temperatura óptima de mezcla.
Esta temperatura oscila entre los 20 y los 24 grados, por lo que dependiendo de si estamos en verano o invierno, nuestro revelador estará más o menos frio/caliente. ¿Cómo hacemos las cuentas?, fácil, como la mezcla va a ser al 50%, si nuestro revelador estuviese a 26º, tendremos que mezclarlo con agua a 22º para que la media se quede en 24, y si estuviéramos en invierno, y el líquido estuviese a 15 grados, tendríamos que ver que para conseguir los 20 grados nos faltan 5 y por tanto el agua tendría que estar 5 grados por encima de los 20, es decir a 25. Si quisiéramos llegar a los 24, nuestro revelador estaría a 9º de distancia por debajo y el agua debería estar a la misma distancia por encima, es decir, a 33º.
Una vez tenemos el agua a la temperatura necesaria, abrimos el bote de revelado, (sólo la tapa, dejando el embudo bien cerrado, y con el giro de cierre realizado) y rellenamos con el revelado y a continuación con el agua, consiguiendo la mezcla 1:1 a la temperatura de 20º o 24º.
Cerramos el bote de revelado cerciorándonos de que la tapa hace vacío apretándola por el centro y escuchando como expulsa el aire sobrante, y ahora comienza el ejercicio que os mencionaba al inicio.
Si el agua está a 20º estaremos 10' y si estaba a 24º estaremos 8', ¿haciendo el qué? pues agitando el bote de revelado con giros de muñeca poniéndolo boca abajo y boca arriba de manera constante de la siguiente forma:
Primer minuto: de manera constante, todo el minuto.
A partir de aquí hasta que cumplan los 10 u 8 minutos mencionados antes estaremos 45" de reposo donde podremos soltar el bote o mantenerlo simplemente boca arriba, para terminar cada minuto con 15" de agitación constante.
Cuando terminemos, abrimos la tapa con cuidado, aseguramos el embudo de nuevo, para que no entre luz ni se nos suelte, y eliminamos el revelador por el desagüe.
PARO
Llenamos el bote con el líquido de paro, hasta que sobresalga un poco por el agujero del embudo. Tapamos el bote y agitamos como antes unos 20", en ese momento abrimos la tapa con cuidado nuevamente y devolvemos el líquido al bote de almacenaje de donde lo sacamos con ayuda del primer embudo y cerrándolo de nuevo mientras sacamos el aire.
FIJADOR
Llenamos también hasta que se vea en el agujero del embudo con el líquido fijador y en este caso:
Agitamos el primer minuto de manera constante.
Descansamos 45" y agitamos los 15 últimos segundos de cada minuto hasta completar un total de 10'.
Devolvemos el líquido fijador de nuevo al bote donde lo almacenemos con ayuda del segundo embudo.
LAVADO
Llegados a este punto, llenaremos 4 veces hasta el embudo con agua entre 18 y 22 grados, agitamos enérgicamente 20 veces arriba y abajo para que el agua lave bien los negativos y desechamos el agua cada 20 sacudidas.
HUMECTADOR
En la jarra grande que os decía que debía caber el bote de revelado, llenamos con agua del grifo y echamos un pequeño chorro del humectador y lo agitamos, saldrá un poco de espuma, que la quitaremos con una espátula, la mano o la tapa del bote de revelado, y de este bote, quitaremos el embudo y sacaremos la o las espirales con los negativos y las sumergiremos en la jarra durante un minuto.
Pasado el minuto, sacamos las espirales y las pasamos por agua limpia ligeramente y abrimos las espirales con cuidado. en este punto necesitaremos poder colgar los negativos en algún sitio donde no haya movimiento de gente y a poder ser que se mueva poco el aire, para evitar que se mueva polvo y se adhiera al negativo. Si disponemos de un armarito pequeño, de 2 metros de altura, sería ideal, ya que podríamos poner una cuerda en la parte superior y colgar los negativos cerrando la puerta y dejándoles escurrir el liquido sobrante.
El tiempo de secado depende de la humedad del ambiente, no es lo mismo que sea en día nublado y lluvioso de invierno que en un día soleado de verano, pero si lo puedes dejar de un día para otro, mejor que mejor.
Cuelga los negativos y colócales una piza con peso en la parte inferior, para que se sequen bien rectos. Yo uso estos de aquí abajo, pero valdría una pinza de la ropa con algo enganchado que tenga más peso que la curva del negativo, para que este se quede recto.
Cuando estén secos, llévalos a una mesa limpia y despejada, y con ayuda de unas tijeras recórtalos de 6 en 6, que es lo que caben en las hojas de contactos (así es como se llaman a las hojas de negativos), y si al final ves que tienes 7 u 8 fotos, no cortes 6+1 o 6+2, córtalos de manera que siempre tengas al menos 3 fotogramas juntos, salvo que te sobre mucha película al final que te permita hacer uso de ella como si de otros fotogramas se tratase.
Esa cuenta de al menos 3 fotos por tira no es para que quede bonito en la carpeta, es porque así será más fácil positivar posteriormente los negativos en la ampliadora.
En el próximo post, os explicaré como hacer los líquidos para positivar nuestros negativos en papel, que será nuestro último post.
Un saludo a tod@s.